Lo único que veo son personas conocidas, 
lugares gastados, caras gastadas.
Están listas y despiertas para los viajes 
que siempre hacen a ningún lado.
Las lágrimas inexpresivas empañan los vidrios.
Me escondo de TODO, quiero ahogarme en mi pena 
porque con todo lo que pasa, no hay mañana.
En cierto modo resulta divertido, en cierto modo triste.
 Los sueños en los que agonizo 
son los mejores que tuve.
 Resulta duro de decir y duro de aceptar, 
cuando la gente camina en círculos. 
Es un mundo desquiciado.
Niños esperando el día en que se sientan bien, 
programados para sentir en el modo en que deberían.
Amplia tu mundo.
Estamos viviendo en un mundo loco.